En medio de crecientes tensiones diplomáticas, la falsificación de documentos agrava la situación de los argelinos en situación irregular en Francia
Mientras las relaciones entre París y Argel atraviesan una crisis sin precedentes, los argelinos en situación irregular en Francia enfrentan crecientes dificultades. Algunos recurren a documentos falsificados para intentar integrarse en el mercado laboral, en un contexto legal cada vez más estricto.
El periódico de lengua francesa «DNA Algérie» destacó la proliferación de tarjetas de identidad europeas falsas, advirtiendo sobre las graves consecuencias legales y humanas.
Un abogado especializado explicó que utilizar documentos falsos para trabajar o solicitar una «Carte Vitale» constituye una violación grave de la ley francesa, que puede llevar a la expulsión inmediata y a una prohibición de reingreso durante varios años. Una vez descubierto el fraude, la regularización se vuelve casi imposible.
Aunque en casos excepcionales algunas prefecturas pueden mostrar cierta flexibilidad por razones de extrema necesidad, estas situaciones siguen siendo raras y poco fiables.
El periódico también señaló que las autoridades francesas utilizan sistemas electrónicos de verificación avanzados, capaces de detectar la más mínima inconsistencia, aumentando así los riesgos de falsificación.
Por otro lado, la crisis diplomática que se intensificó tras la negativa de Argelia en marzo de 2025 a recibir a sesenta de sus nacionales deportados ha complicado aún más la situación.
En medio de este panorama, voces políticas francesas exigen políticas migratorias más duras contra Argelia, mientras que el gobierno argelino insiste en el respeto de la soberanía mutua.
Frente a este complejo escenario, los argelinos en situación irregular se debaten entre esperar durante años una posible regularización o arriesgarse a falsificar documentos, con el peligro de ser expulsados de manera definitiva.
